Una vez resuelto que podrá haber reapertura de paritarias antes de las fechas estipuladas, y se acelerarán las que no se encuentran en etapa de tratativas, los gremios pisan el acelerador. Esta semana una treintena de organizaciones sindicales ya negocia el reajuste de sus salarios en el marco de paritarias convocadas o no de manera oficial por el Ministerio de Trabajo, mientras la totalidad de los voceros gremiales coincide en que el adelantamiento de las negociaciones debe «ganarle al elevado proceso inflacionario», por lo cual los dirigentes se inclinan por «acuerdos cortos».
Otro de los ejes planteados días pasados es la presentación y apoyo a una canasta de productos esenciales a precios regulados en comercios de cercanía; un aspecto que parece muy lejano en el interior profundo del país.
La cartera laboral firmó el miércoles 6 de abril la Resolución 388/22, publicada en el Boletín Oficial del día siguiente, que oficializó la convocatoria al diálogo paritario para más de veinte gremios y las cámaras empresariales de cada sector, aunque otras organizaciones sindicales ya habían comenzado a negociar varias semanas antes.
La aceleración de la inflación fue decisiva en la convocatoria, ya que los indicadores superan ampliamente las estimaciones.