Absolvieron a un policía acusado de hurto en Gan Gan por “desistimiento voluntario”

Un fallo judicial dictado por la jueza Patricia Asaro absolvió al policía Gabriel Alejandro Castillo, acusado de sustraer $100.000 de un vehículo en Gan Gan. La magistrada argumentó que el imputado realizó un “desistimiento voluntario“ al devolver el dinero tras ser confrontado, descartando el delito de hurto agravado.

El incidente ocurrió el 27 de mayo de 2022, cuando José Arévalo estacionó su Ford Eco Sport frente al comercio “Rechene“. Según los testimonios, Castillo abrió el vehículo y sustrajo un fajo de billetes de $100.000 que estaba en la guantera. Este acto fue presenciado por Anahí Arévalo, hija del propietario, y el dueño del local.

Tras el robo, Arévalo y su hija confrontaron a Castillo en la comisaría donde este trabajaba. Aunque inicialmente negó los hechos, el policía luego devolvió el dinero tras ser informado de que había sido observado. La denuncia fue presentada por el jefe de la comisaría, Fabián Moreno.

El fallo judicial

Durante el juicio en los Tribunales de Puerto Madryn, la jueza Asaro sostuvo que la devolución del dinero implicaba la ausencia del «dolo» necesario para configurar el delito de hurto agravado. “El acto de devolver íntegramente el fajo de billetes demuestra que no hubo una afectación definitiva al patrimonio de la víctima“, señaló.

El fallo concluyó que la acción de Castillo constituyó un “desistimiento voluntario“, ya que el imputado abandonó el ilícito antes de que se consolidara el daño patrimonial.

La fiscal Ivana Berazategui argumentó que la devolución del dinero no fue un acto voluntario, sino que ocurrió bajo presión tras ser confrontado por las víctimas. “El desistimiento voluntario implica una decisión autónoma del sujeto de abandonar el delito antes de ser descubierto. En este caso, Castillo solo devolvió el dinero después de ser cuestionado, lo que debería invalidar esta hipótesis“, expresó.

Berazategui había solicitado una condena por hurto agravado, asegurando que todos los elementos del delito estaban probados. Sin embargo, la jueza consideró que la devolución del dinero desactivó el carácter consumado del ilícito.

Repercusiones

El fallo ha generado debate respecto a los alcances del concepto de “desistimiento voluntario“ y sus implicancias en casos donde el imputado actúa tras ser confrontado. La resolución deja en evidencia las diferencias de interpretación entre la Fiscalía y el tribunal sobre el dolo y la consumación del delito.