Natalia Gutiérrez es madre de Fernando, un adolescente de 14 años con trastorno del espectro autista, quien asiste a la Escuela de Dedicación Especial 531 y que, por problemas de infraestructura y falta de respuesta de autoridades provinciales, no puede concurrir a clases al igual que sus compañeros.
En diálogo con AzM Radio, contó que «desde que la escuela se inauguró ya tuvo problemas, la directora nos contaba que envió como 600 notas y que jamás tuvo respuesta» y advirtió que «vamos dos años con esto, el año pasado no hubo clases y el anteaño solo unos meses».

Sobre su caso en particular, explicó que «mi hijo tiene autismo, lo han ayudado bastante ya que no leía ni escribía, y avanzó un montón gracias al gran equipo que tiene la escuela, pero ahora parecería ser que retrocedió todo lo que había avanzado».

Asimismo, Gutiérrez pidió «que vayan y se fijen, porque no hay calefacción, Internet ni teléfono que es fundamental: si pasa algún accidente no tienen cómo comunicarse» y precisó que «hay unos 20 chicos» que concurren al establecimiento.