Plantean permitir el ingreso de buques extranjeros a puertos argentinos para potenciar la economía local
El abogado Roberto Wyn Hughes, miembro de la Cámara de Prestadores Marítimos y Portuarios de Chubut, destacó la necesidad de evaluar seriamente la atención de la flota extranjera que opera en la milla 201, una iniciativa que considera clave para el desarrollo económico de la región.
Wyn Hughes, quien ha trabajado como representante legal de diversos buques capturados en dicha área, señaló que “este es el momento adecuado para analizar con seriedad este tema”, argumentando que la medida podría aportar importantes beneficios económicos para Chubut.
Diversidad de flotas y sanciones “insignificantes” para Argentina
Además, subrayó que no solo buques chinos operan en la milla 201, sino también coreanos, españoles, alemanes y, en algunos casos, barcos con bandera venezolana. “He representado a varios de ellos, y la mayoría terminó pagando una multa que para ellos es barata y para Argentina insignificante”, comentó. Asimismo, expresó su asombro por la falta de capturas de buques infractores en los últimos cuatro años, lo cual considera una pérdida de ingresos para el país y una oportunidad desaprovechada para la regulación de estas actividades.
Según el abogado, permitir que estas embarcaciones extranjeras ingresen al mar argentino para actividades como el reabastecimiento, el cambio de tripulación o reparaciones, no implica que se les autorice a pescar en aguas nacionales. Wyn Hughes enfatiza que, dado el método utilizado por estos barcos —pesca nocturna con luces especiales para atraer el calamar—, sería fácil monitorear sus actividades. “Hoy pueden ser fácilmente monitoreados, hasta de un celular, por lo tanto es relativamente fácil de controlar”, afirmó, defendiendo que una buena supervisión podría evitar posibles abusos de los recursos marítimos argentinos.
Casos de ingreso por emergencias: una muestra de rentabilidad
Wyn Hughes menciona que entre 2023 y julio de 2024 ingresaron a puertos argentinos siete buques de bandera china y coreana en casos de emergencia, generando ingresos significativos para los puertos y los negocios locales. Durante estos ingresos, las embarcaciones contrataron servicios de agencias, sanatorios, hoteles y restaurantes, dejando “ingentes réditos” en la economía local.
El abogado también criticó la incapacidad de Argentina para explotar sus propios recursos en la milla 201, destacando que “no hemos sido capaces de ir a pescar a las 200 millas masivamente con buques de bandera argentina”. Menciona que, a pesar de la cercanía, la falta de una flota nacional consolidada y una industria pesquera desarrollada ha dejado el recurso del calamar en manos de flotas extranjeras que recorren miles de kilómetros para capturarlo.
Wyn Hughes describió cómo empresas extranjeras han mostrado interés en invertir en infraestructura y recursos en la región, pero sus propuestas no han avanzado. “Clientes chinos, antes de la pandemia, visitaron el astillero abandonado de Comodoro Rivadavia y manifestaron interés por reactivarlo”, ejemplifica. También mencionó intentos de trasladar tripulantes desde sus países de origen a través de vuelos chárter que no fueron autorizados, lo que considera una oportunidad perdida para la economía local.
Una propuesta de prueba piloto y un llamado al gobierno
El abogado sugirió implementar una prueba piloto, limitada en el tiempo, para evaluar los resultados económicos y administrativos de permitir el ingreso de la flota extranjera en condiciones reguladas.
Además, insta al gobierno a convocar a representantes de cámaras empresariales y sindicatos interesados para tratar el tema de manera estructurada. Propone incluso realizar misiones a países como China, Corea y España para avanzar en negociaciones concretas, especialmente ahora que el gobierno nacional ha delegado a las provincias la responsabilidad de promover su propio desarrollo.
“Sería un despropósito no aprovechar los recursos naturales propios y seguir perdiendo ingresos y mano de obra. Esta es una alternativa que merece ser evaluada seriamente”, concluyó Wyn Hughes, llamando a considerar este proyecto como una medida estratégica en la agenda de desarrollo económico provincial.