En el marco del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, se realizó un evento en el barrio Pujol de la localidad de Puerto Madryn, en donde se intentó concientizar sobre la problemática. En este contexto, Paula Pérez Tellie, trabajadora social del Centro de Salud Favaloro, brindó precisiones de la iniciativa.

En primer lugar, destacó que “quisimos poder estar afuera, con una mesa informativa y folletería que elaboramos nosotras mismas, con barbijos con frases. El lema que pensamos para hoy es que el barbijo no nos calle. En el Hospital hay un Comité de Violencia de Género y también hemos publicado alguna información para aprovechar esta imagen y fomentar algunos cuidados, como el uso del barbijo y del tapaboca”.

“Que el barbijo no nos calle”

“Hoy, en este día especial, pedimos que el barbijo no nos calle, que el tapaboca no nos tape la boca, y que podamos decir ‘basta de violencia’ y ‘ni una menos’”, insistió.

Además, recordó que “en lo que va de 2020, ocurrieron más de 265 femicidios. La mayoría de estos femicidios fue realizada por personas íntimas, convivientes. Hay que visibilizar, hoy más que nunca, el tema de la violencia que nos toca en el medio de esta pandemia, donde las mujeres hemos quedado más expuestas a la violencia, por estar confinadas junto al agresor”.

Al respecto, sostuvo que “nos parece que, desde el primer nivel de atención, este tipo de acciones son indispensables”.

Efectos de la pandemia

Si bien afirmó que en todos los CAPS de Puerto Madryn se prestan servicios vinculados con la violencia de género, precisó que como efecto de la pandemia de coronavirus se han modificado los mecanismos de funcionamiento y de organización.

Al ser consultada sobre la variación que han evidenciado en los casos de violencia de género con la aparición del Covid-19, Pérez Tellie dijo: “No sé si nosotros hemos notado más casos que antes, lo que puedo decir que es que seguimos atendiendo casos de violencia, sí por supuesto. Las hemos alojado y las hemos atendido”.

“A nivel nacional se sabe que en la pandemia se ha acrecentado el tema de la violencia porque no hemos podido salir, ni circular. Eso nos va dejando más aisladas y hemos visto disminuidas nuestras redes de contención. Eso deja más expuestas a las mujeres que quizás ya convivían con su agresor”, concluyó la trabajadora social.