El Concejo de Madryn aprobó la refinanciación de deuda con Ashira
Este jueves se llevó adelante la 12ª Sesión Ordinaria del Concejo Deliberante de Puerto Madryn donde se aprobó la refinanciación de la deuda que mantiene la Municipalidad con la empresa Ashira. Además, se sancionó la Ordenanza de “Cocinas Comunitarias Municipales”, iniciativa que busca fomentar la actividad de pequeños emprendedores en la elaboración de alimentos de bajo riesgo en la ciudad.
Los concejales de Juntos por el Cambio decidieron abstenerse en la votación sobre el tema Ashira indicando que esperan que se proponga una solución de fondo y no parches o arreglos parciales.
Lo aprobado en la sesión se trata de la ratificación de un convenio entre las partes, que habla sobre la refinanciación de una deuda que mantiene la Municipalidad con la empresa y se estipuló que se pagada en 18 cuotas.
“Es entendible la postura de la oposición ya que no tenían conocimiento del convenio. Es una deuda que ya lleva varios años y en realidad surge de que este servicio está financiado por una tasa y por ende se le cobra a cada uno de los vecinos de Puerto Madryn”, aclaró el Presidente del Concejo.
Luego informó que “el Municipio no tiene un índice de cobrabilidad del 100% de contribuyentes, por lo que lógicamente no se puede cubrir el costo del servicio y se genera una deuda. A partir de allí, es que surge esta refinanciación, que genera un interés, y que se puede pagar con lo que debe el contribuyente que no está en tiempo y forma con sus pagos. Tienen intereses equivalentes”.
En tanto, el programa “Cocinas Comunitarias” aprobado por unanimidad establece la creación de espacios compartidos de elaboración de alimentos, autorizados y establecidos por el Ejecutivo Municipal con el objetivo de promover el empredurismo.
Estos espacios tienen como objetivo brindar a los emprendedores locales un lugar físico que cumpla con las condiciones de higiene, salubridad y seguridad necesarias para la protección de los consumidores. Entre otros puntos se establece la definición de requisitos específicos para el espacio físico de las cocinas, incluyendo normas sobre pisos, paredes, techos, ventilación e instalaciones sanitarias. Además, la implementación de un sistema de rotulado especial para los productos elaborados en estas cocinas y el establecimiento de controles periódicos por parte de la autoridad de aplicación para garantizar las condiciones higiénico-sanitarias.