La abogada y presidenta de la Asociación de Mujeres Penalistas de la Argentina (AMPA), Mariana Barbitta, se refirió al escándalo desatado tras la viralización de los videos que mostraban a la jueza de Comodoro Rivadavia, Mariel Suárez, besarse con el condenado a perpetua Cristian «Mai» Bustos, al considerar que la magistrada es víctima de “hostigamiento” por su género.
«Es machista y patriarcal y cuando uno piensa en derecho penal, piensa en varones en general, por eso en 2012 decidimos juntarnos y trabajar en esto» y habló el comunicado emitido desde la entidad, considerando que «fue muy violenta toda la difusión que se generó en los medios, en torno a un video que apareció y que habría sido filmado desde una Unidad Penitenciaria, y que involucra a una jueza».

“Poder Judicial patriarcal y machista”

«El acceso de mujeres a los cargos de mayor jerarquía es algo en lo que tenemos que seguir trabajando todavía», agregando que «en relación al caso concreto, cuando uno piensa en el estereotipo de ‘buena jueza’, construido por un Poder Judicial patriarcal y machista, se produce justamente una violencia en una sociedad que ya la juzgó y condenó, sin derecho a la defensa».
Asimismo, Barbitta consideró que Suárez sufre un «hostigamiento» por su condición de mujer, remarcando que «nosotras, que entramos a las cárceles, sabemos lo que es que una defensora o abogada entre y se entreviste con alguien con confidencialidad, con conversaciones que no pueden ser escuchadas por otras personas».

“Violencias mediáticas”

En otro orden, la referente de abogadas penalistas nucleadas en AMPA explicó que la jueza Mariel Suárez habló con Bustos «porque está investigando casos de corrupción policial, y en ese contexto pidió autorización, se la dieron y ella estaba trabajando en términos académicos» y, consultada sobre lo disruptivo que pudiera resultar que una jueza integrante del tribunal que condenó a Bustos, se besara con el recluso, Barbita consideró que «justamente, ella no entró con funciones jurisdiccionales, hay que separar».
«Siempre somos las mujeres las que estamos recibiendo las violencias mediáticas, políticas y judiciales», señaló la letrada.