Despiden a una empleada municipal de Comodoro tras denunciar hechos de corrupción
Muriel Del Valle, exdirectora general en el municipio de Comodoro Rivadavia, enfrenta lo que describe como un “despido arbitrario e ilegal” tras haber denunciado actos de corrupción en la en la gestión del intendente Othar Macharashvili, puntualmente en la Secretaría de Cultura. Según ella, la medida fue publicada en el Boletín Oficial sin notificación previa en violación a la norma de procedimiento administrativo pre establecido y violando los derechos del estatuto municipal, un hecho que considera una afrenta más en un largo historial de persecución laboral.
Del Valle relató que descubrió su cesantía gracias a capturas de pantalla enviadas por colegas y amigos. “Es indignante que ni siquiera me hayan notificado formalmente. Me enteré por terceros”, declaró. La cesantía es una maniobra forzada con el fundamento de un expediente administrativo que fue aportado como prueba documental en la denuncia penal por falsificación de documento público por lo tanto como se funda un supuesto traslado en un documento que es prueba de un delito, el decisorio está recurrido y hoy en revisión por el superior jerárquico
El plazo legal para justificar su traslado venció sin respuesta, lo que, según ella, evidencia la falta de fundamentos para estas acciones. “No les alcanzó el tiempo porque ya no saben qué otra mentira inventar para sostener estas prácticas corruptas”, afirmó con indignación.
En septiembre, Muriel Del Valle presentó denuncias penales contra Liliana Peralta, secretaria de Cultura, y Miguel Montoya, subsecretario de Recursos Humanos, funcionarios claves dentro de la administración encabezada por Macharashvili. Entre las acusaciones se encuentran delitos como abuso de poder, malversación de fondos públicos y falsificación de documentos.
“Mi compromiso con la administración pública fue lo que molestó. Si hacés bien tu trabajo y denuncias, te sacan”, sentenció Del Valle. También aseguró que su situación es un reflejo de lo que muchos empleados municipales enfrentan en silencio. “Hay compañeros que tienen miedo de hablar”, agregó.
Del Valle no se quedó de brazos cruzados y ya inició recursos administrativos para impugnar las medidas en su contra. Además, anunció que recurrirá a la justicia para recuperar su cargo. “Confío en que la justicia prevalecerá. No voy a permitir que estos funcionarios sigan destruyendo carreras por capricho o intereses personales. Los funcionarios públicos municipales están tratando de adoctrinar con estos castigos a los empleados públicos de carrera como yo para que no denunciemos y seamos cómplices de corrupción y continue la impunidad en la administración pública”, manifestó con determinación.
El caso no solo expone el clima laboral dentro del municipio, sino que también pone en la mira la gestión de Othar Macharashvili y sus funcionarios, como Peralta y Montoya. Según los documentos presentados por Del Valle en sus denuncias, a los que este medio tuvo acceso, se describen maniobras presuntamente corruptas que incluyen nepotismo y negociaciones incompatibles con la función pública malversación de caudales públicos y falsificación de documentos.
Muriel Del Valle busca que su lucha inspire a otros a denunciar irregularidades. “Debemos decir basta a los políticos que arruinan nuestras vidas laborales. La única meta es la justicia”, expresó.