México aplicaría un impuesto a los pasajeros de cruceros

El Gobierno mexicano planea imponer una tarifa de inmigración de 42 dólares para cada pasajero en un crucero que atraque en el país, ya sea que desembarquen o que se queden a bordo. La nueva ley establece que el Instituto Nacional de Migración de México (INM) emitirá una “visa colectiva a cada persona en la lista de pasajeros del barco”.

Si a esto se suma una tarifa de 5 dólares por pasajero impuesta por los estados locales, haría que los destinos mexicanos estén entre los más caros del mundo, según la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (AMANAC).

En un comunicado, la asociación instó al Gobierno a reconsiderar su implementación. Advierte que la industria de cruceros mexicana sería menos competitiva con otros destinos del Caribe que serían menos costosos de visitar. Actualmente, los pasajeros de cruceros están exentos de las tarifas de inmigración de México ya que se consideran “en tránsito”.

Un impacto potencialmente grande

 La cuota, aprobada por ambas cámaras del Congreso mexicano, destina dos tercios del impuesto para financiar al Ejército mexicano. El nuevo cargo está programado para entrar en vigor el 1 de enero, dejando poco tiempo para que los turistas se ajusten al nuevo gasto.

En su comunicado, AMANAC dijo que “México podría perder hasta 10 millones de pasajeros y más de 3.300 escalas de barcos en 2025” si se implementa el impuesto.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, defendió la medida, insistiendo en que no es un nuevo impuesto, sino solo un ajuste a los cargos existentes que, según ella, están vinculados a la inflación. También mencionó que las conversaciones continúan entre las agencias afectadas por la tarifa.

Reacción adicional a la medida

 Michele Paige, directora ejecutiva de la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe, un grupo comercial que representa a embarcaciones que operan en Estados Unidos, América Latina y el Caribe, dice que la mayoría de los cruceros reservados para 2025 ya están pagados y las compañías podrían ser reacias a llevar a sus pasajeros a lugares que imponen tarifas inesperadas.

“Apreciamos la garantía de la presidenta Sheinbaum durante su conferencia de prensa del miércoles (4 de diciembre) de que el cambio ocurrirá lentamente y que ha instruido a los funcionarios federales a trabajar con nuestra industria, pero aún no hemos escuchado de nadie”, dijo Paige en un comunicado de prensa enviado a CNN Travel este jueves.

Sergio Gonzáles Rubiera aún no está alarmado por el nueva impuesto. Es el presidente de la Asociación de Agentes de Viajes en Cozumel, el principal destino de cruceros de México y uno de los puertos más visitados del mundo.

Dice que algunas navieras podrían omitir los puertos mexicanos en protesta, pero cree que la mayoría incluirá la tarifa en el precio de los viajes futuros. Lo que lamenta es que el Gobierno federal se quedará con la mayor parte del dinero en lugar de ayudar a las comunidades locales.

El expresidente de México Andrés Manuel López Obrador amplió el papel de las Fuerzas Armadas mexicanas, que ahora supervisan la construcción de muchos proyectos de infraestructura como el Tren Maya, una serie de nuevas rutas de tren que conectan algunos de los destinos turísticos del sureste de México.

 

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