Alrededor de las cinco y media de la madrugada del sábado, personal de la Seccional Primera de Puerto Madryn fue alertado por un Volkswagen Gol Trend que había estacionado sobre la calle Roque Sáenz Peña al 200 en contramano, y cuyo conductor se encontraba en aparente estado de ebriedad. El auto había sido «estacionado» frente a una conocida librería; sin embargo, poco «útiles» fueron los esfuerzos del individuo por mantenerse en pie una vez que abandonó el habitáculo.

Una vez en el lugar, se encontraron con «J. S.», de 32 años, quien poseía cualidades tales como «falta de coordinación motriz, balbuceo al hablar, fuerte aliento etílico», al cual no pudieron ni siquiera identificar por el estado en el que se hallaba, por lo que los agentes debieron recurrir a la documentación que se encontraba en el interior del vehículo.

Al cabo de unos minutos, personal de Tránsito municipal arribó a la escena y realizó el test de alcoholemia al sujeto, el cual arrojó 2,15 gramos de alcohol por litro de sangre, es decir, el máximo permitido según la legislación local vigente.

Como si ello fuera poco, su acompañante, de 30 años, también dio positivo al test de alcohol, arrojando 1,78g/l. Finalmente, se labraron las actuaciones correspondientes y se secuestró el vehículo, el cual quedó a disposición del Juzgado de Faltas local.