A veces, en el día a día no nos detenemos a pensar en todas las pequeñas cosas que hacen a la vida en la tierra. Una de ellas y muy importante son las abejas. Ellas, han sido declaradas recientemente como la especie viva más importante de este planeta según el Earthwatch Institute. Esta declaración es preocupante porque, según los científicos y expertos en vida silvestre, las abejas están en la lista de especies en peligro de extinción.
Estudios recientes muestran una disminución del 90% en la población de abejas en los últimos años. Las principales razones de su extinción incluyen la deforestación, el uso de pesticidas o la falta de ores.

¿Por qué?

Se considera que las abejas son el ser más importante de la tierra porque el 70% de la agricultura mundial depende exclusivamente de las abejas. Sin el arduo trabajo de polinización de las abejas, esas plantas no podrían reproducirse.
Según un estudio realizado por Investigadores de la Corporación Apícola de Chile, el Centro de Emprendimiento Apícola de la Universidad Mayor y la Fundación para la Innovación Agraria, Las abejas son las únicas especies vivas que no portan ningún patógeno (enfermedades producidas por virus, bacterias y/u hongos).
Después de todo, la opinión de Albert Einstein sobre las abejas nunca ha sido más cierta. «Si las abejas desaparecen, los humanos tendrían 4 años de vida», dijo el famoso físico.
La agricultura ecológica es necesaria para preservar los hábitats silvestres y proteger a las abejas. Esto funciona evitando los grandes monocultivos y preservando la diversidad del ecosistema. Esto incluye dejar de utilizar pesticidas y fertilizantes químicos.
Como resultado, se restablecerán las poblaciones de abejas y, por lo tanto, se mejorará la polinización y mejorarán los rendimientos de los cultivos.

¿Cómo ayudarlas?

Global Research enumeró tres formas de ayudar a mantener la población de abejas:
– Prohibir, reducir, el uso de pesticidas tóxicos.
– Promover alternativas agrícolas completamente naturales.
– Realizar investigación y seguimiento constante de la salud, bienestar y conservación de las abejas.
La plantación de especies nativas es una forma sostenible e inteligente de atraer fácilmente a las abejas a nuestro jardín. En el jardín, terraza o huerta se puede crear un espacio para plantas que atraen a las abejas; como ser petunias, amapolas, margaritas, claveles, geranios, rosas, caléndula, girasoles, borraja; hierbas como la menta, lavanda, romero, albahaca, tomillo; vegetales como pepino, cebolla, calabazas, brócoli y coliflor; árboles frutales como por ejemplo un manzano, un cerezo o un arbusto de moras.