EN RÍO GALLEGOS

Lo condenaron penalmente por tener 400 gramos de marihuana y una balanza

El Tribunal Oral Federal se reunió para dar a conocer el fallo en contra de un joven que fue detenido en la tarde del 27 de febrero del año 2019, cuando el personal de la Policía Federal lo encontró con varios envoltorios de marihuana y cigarrillos armados artesanalmente.

Cabe recordar, que todo comenzó cuando la Brigada de Investigaciones de la Policía Federal Argentina que investiga la presunta comercialización de marihuana por parte de una pareja en la Costanera, realizó el 28 de febrero de 2019, un allanamiento en la vivienda que alquilan los sospechosos e incautaron más droga y semillas de cannabis sativa para su cultivo.

El procedimiento fue ordenado por las autoridades del Juzgado Federal de Río Gallegos y, en horas de la mañana, lo concretaron investigadores de la delegación local de la fuerza nacional en un domicilio ubicado en la calle Albert Sabin al 2500, en el Barrio Evita.

Se halló en la vivienda, que era alquilada por la pareja, al menos otros 300 gramos de marihuana; unas 10 bolsas conteniendo semilla de cannabis sativa; y elementos para el fraccionamiento del estupefaciente.

Se presume que las semillas de marihuana -estimándose eran adquiridas en Chile- iban a ser germinadas y luego cultivadas en otra propiedad con mayor espacio.

En el marco de la causa, también se secuestró una computadora y otro teléfono celular. Se supo que el individuo tiene el oficio de mecánico y, junto a su pareja, fueron alojados en la sede de la Policía Federal en carácter de incomunicados hasta que fueron indagados por las autoridades judiciales.

Los jóvenes fueron detenidos en la Costanera local con unos 100 gramos de marihuana, y ahora se investiga si comercializaban la droga esa zona de la ciudad.

Los sospechosos de 25 y 26 años, fueron sorprendidos por agentes de la Brigada de Investigaciones de la Policía Federal cuando realizaban un patrullaje preventivo por la ría, en especial, por inmediaciones del Colegio Guatemala.

El procedimiento se concretó cuando los uniformados sorprendieron a la pareja que se encontraba en el interior de un automóvil marca Volkswagen Gol, frente al Monumento a ‘Pilotos Caídos en Combate’.

Los efectivos hallaron en el interior del rodado unos 100 gramos de marihuana, que se encontraba fraccionada, y había cigarrillos artesanales de cannabis sativa, conocidos comúnmente como «porros». También tenían una balanza digital y otros elementos para el fraccionamiento y consumo de cannabis sativa, indicaron fuentes que participaron del operativo. Además, se incautaron unos 4 mil pesos y los teléfonos celulares de ambos.

El procedimiento de requisa y detención de la pareja fue ordenado por las autoridades judiciales, en el marco de un delito de «tenencia de estupefacientes con fines de comercialización».

Al inicio de la audiencia, la Fiscal Federal hizo lucir una propuesta de juicio abreviado, la que fue firmada por el defensor particular del joven imputado.

El Tribunal que actuó de manera unipersonal, realizó la audiencia visu, en la cual le preguntó al imputado si estaba de acuerdo con la propuesta y si reconocía los hechos que se le atribuían, a lo que respondió afirmativamente.

Luego de valoradas las pruebas recibidas en la instrucción, la propuesta formulada por el Ministerio Fiscal y la Defensa; la admisión de responsabilidad efectuada por el imputado, de conformidad con las disposiciones legales citadas, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de la Provincia de Santa Cruz, falló en condenar a un año de prisión en suspenso y una multa de $ 250.000, por ser penalmente responsable del delito de Tenencia simple de estupefacientes.

Además, se le impuso por el plazo de dos años, las siguientes reglas de conducta por entender que resultan adecuadas para prevenir la comisión de nuevos delitos: fijar domicilio, debiendo notificar al Tribunal cualquier modificación del mismo; realizar presentaciones mensuales ante el Patronato de Liberados y Excarcelados de Rio Gallegos. Asimismo. deberá abstenerse de consumir estupefacientes y bebidas alcohólicas en lugares públicos o de manera ostensible; no cometer nuevos delitos; completar estudios de nivel secundario, lo que deberá acreditar ante este Tribunal, todo ello bajo apercibimiento.

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