El papa Francisco presidirá la Vigilia del Sábado Santo tras renunciar al Vía Crucis para cuidar su salud

El papa Francisco sorprendió a todos al cancelar su participación en el Vía Crucis de forma repentina para cuidar su salud. En las últimas horas, el Vaticano confirmó su presencia en la vigilia de Pascua del Sábado Santo en la basílica de San Pedro.

Papa Francisco renunció a presidir el Vía Crucis«Para preservar su salud en vista de la vigilia de mañana y de la misa del domingo de Pascua, el papa Francisco seguirá esta tarde el vía crucis en el Coliseo desde la residencia de Santa Marta», anunció el Vaticano poco antes del inicio de la ceremonia sin dar más precisiones.

Debido a la repentina decisión, la preocupación sobre el estado de salud de Francisco comenzó a aumentar y una fuente de la Santa Sede aclaró que se trató de «una simple medida de prudencia«.

En el Vía Crucis en 2023, el papa Francisco también canceló su participación debido a las bajas temperaturas y a que se recuperaba de una hospitalización de tres días debido a una bronquitis. Además, se comunicó antes de que se diera inicio a la ceremonia.En los últimos días, el pontífice había cumplido sus compromisos hasta presidir, según lo previsto, el oficio de la Pasión de Cristo el viernes por la tarde. Sin embargo, en sus últimas apariciones parecía cansado y se vio obligado en varias ocasiones a delegar la lectura de sus discursos invocando una bronquitis, por la cual pasó exámenes en un hospital de Roma a finales de febrero.

Preocupa la salud del papa Francisco

La anulación del viernes amenaza con reavivar los interrogantes sobre la capacidad de Jorge Bergoglio para seguir gobernando la Iglesia católica.

A pesar de una importante operación del abdomen en 2023, el Papa sigue sometiéndose a un ritmo de trabajo desenfrenado en el Vaticano. Sin embargo, debido a una bronquitis, no realizó ningún viaje desde su visita a Marsella en septiembre y tuvo que cancelar su presencia en la COP28 que se realizó en Dubái en diciembre.

De todas formas, en una autobiografía publicada a mediados de marzo, Francisco reiteró que no tenía «razones serias» para renunciar a su cargo y que se trata de una «hipótesis lejana» que se justificaría solamente en caso de «grave impedimento físico«.