The Wild: La leyenda del Rock – Parte 11
Agosto 1969: Woodstock
Sin bien su paso por Buenos Aires había marcado para siempre la vida de THE WILD, su incursión en el famoso Festival de Woodstock en agosto de 1969 fue crucial para su formación como rockeros absolutos, como creadores de un estilo original, novedoso que nunca fue igualado en los tiempos que los sucedieron,. En definitiva, Woodstock los convirtió en artistas integrales dedicados al rock más crudo y legendario que se hubiera conocido jamás sobre el suelo terrestre.
Para llegar al predio del gran festival, que se iba a realizar en Bethel, Nueva York, Los muchachos, junto a un grupo de miembros de la comunidad hippie de High-Ashbury, emprendieron un largo pero divertida viaje desde San Francisco hasta la costa este, es decir, prácticamente atravesaron el país de costa a costa.. Junto a Frank viajaba Linda Whells, su novia del momento, una bellísima rubia sin maquillaje, vestida con blusas y pantalón ancho y lleno de colores., y otros 25 hombres y mujeres de la cofradía. Miles de kilómetros, varias noches de locura en medio de la ruta, durmiendo en el piso de un autobús escolar destartalado convertido en motorhome, con poco agua para lavarse pero mucha cerveza y tequila, arribaron al predio del histórico festival hippie. Y, por supuesto, el consabido mate, que sólo lo tomaban los cuatro de THE WILD. El resto de los hippies los observaban manipulando y bebiendo aquel raro brebaje, se reían pensando que era una nueva droga, pero no querían probarlo.
No es nuestra intención describir en esta investigación de Frank y THE WILD una descripción minuciosa de lo que significó el festival para el arte y la música en particular, de modo que saltearemos los dos primeros días de recitales y pasaremos directamente al domingo 17 de agosto, en momentos que ocuparían el escenario figuras de la talla de Joe Cocker, Ten Year After, Country Joe And The Fish, Johnny Winter y Blood Sweet And Tears, entre otros monstruos.
Las grandes bandas se sucedían una tras otra, hasta que, muy entrada la mañana del lunes, suben al escenario los Sha-na-na, la formación previa al ingreso del grandioso Jimi Hendrix. Sha-na-na termina su set de canciones muy temprano, alrededor de las 8 de la mañana (Hendrix entraba a las 8.30, y todavía no había llegado). Para evitar esa media hora fatídica de vacío, los productores comenzaron a buscar desesperados a alguna banda que todavía estuviera en el predio. Enterado de esto, Al Fresno rápidamente contacta a los productores de Woodstock y les ofrece a sus muchachos, THE WILD. Pensamos que, de no ser porque ya iban como 16 horas de show ininterrumpido, y como toda la concurrencia no estaba en un estado de raciocinio como para poder juzgar a tal o cual banda, aceptaron *.
• Las demoras y cambios de horarios fueron constantes durante el festival, no fue sencillo ordenar a tantas bandas juntas. (The Woodstock real report, Braian Leclox, 1972)
Continuará…
Por Carlos Alberto Nacher
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