Carlos Deamo: “Somos jubilados, marchamos por nosotros y por los que vienen detrás”
Puerto Madryn es una de las ciudades del país en la que se replica la ya tradicional marcha de los jubilados, una movilización que se realiza todos los miércoles a nivel nacional para visibilizar las problemáticas que enfrentan los adultos mayores. En esta oportunidad, la manifestación local sumó el acompañamiento de sectores políticos, gremiales y vecinos afectados por la desocupación y por la condena a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
“Las marchas son pacíficas y con una muy buena comunicación tanto con la Policía como con Tránsito”, destacó uno de los voceros del Consejo de Adultos Mayores Carlos Deamo. Según explicó, el objetivo sigue siendo reclamar por mejoras en la atención médica, mayor celeridad en la resolución de trámites del PAMI y mejores condiciones de vida para las personas mayores. Sin embargo, en esta ocasión se sumaron otras demandas que también reflejan el difícil contexto social y económico que atraviesa la ciudad.
Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue la participación de un niño, hijo de un trabajador de la pesca desempleado, quien se unió a la marcha con una pancarta pidiendo trabajo para su padre. El pequeño tomó el megáfono y expresó con sus propias palabras la difícil situación de su familia. “Marchó con nosotros hasta la municipalidad. Le dijimos que él era el manifestante más joven y yo el más viejo”, recordó entre risas Deamo.
Durante la movilización también se escucharon consignas vinculadas a la situación judicial de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, lo que motivó la presencia de militantes del peronismo, el PSA y el kirchnerismo. “Mientras las marchas sean tranquilas, todos son bienvenidos”, afirmaron desde la organización, quienes insistieron en que los reclamos de los jubilados no excluyen otras problemáticas que afectan al conjunto de la comunidad.
Puerto Madryn cuenta actualmente con unos 12.000 adultos mayores y cerca de 10.000 personas desempleadas o con empleos precarios. “Si cada vez hay menos aportantes en blanco, va a ser muy difícil que las generaciones que vienen puedan acceder a una jubilación”, advirtió Deamo.
También hubo críticas hacia el funcionamiento del sistema de salud y las demoras en la restitución del servicio de ambulancia del PAMI, que se espera quede resuelto recién a partir del 1 de julio. “Nos dijeron que se necesitaba tiempo para rearmar el sistema, pero para el jubilado lo que menos tiene es tiempo”, señaló.
Desde el Consejo de Adultos Mayores recordaron que, más allá de las marchas, trabajan junto a abogados para canalizar los reclamos formales y garantizar que los afiliados tengan una vía clara para exigir respuestas y que en este sentido se están capacitando para reclamos futuros. Además, pidieron a las autoridades sensibilidad en el trato hacia los adultos mayores y soluciones concretas, sin dilaciones burocráticas.
“Somos jubilados, marchamos por nosotros y por los que vienen detrás”, concluyó Deamo.
