Los baches en Comodoro Rivadavia crecen al ritmo del plazo fijo de Othar
Transitar por la ciudad de Comodoro Rivadavia es una verdadera aventura, y llegar a destino todo un reto. Abundan los baches y las obras inconclusas en las calles de la ciudad. Desde el inicio de la gestión de Othar Macharashvili se han comprometido inversiones que nunca llegan. Unos pocos de los tantos anuncios realizados en el primer trimestre de 2024, apenas si lograron avanzar a la etapa de licitación en el último trimestre del año, y la ejecución de las obras resulta un verdadero misterio para los vecinos.
A diferencia de otras localidades de Chubut que pueden requerir asistencia provincial o nacional para ejecutar obras menores, Comodoro Rivadavia cuenta con fondos propios. En agosto de 2024, el Intendente reconoció que el municipio contaba con 12 mil millones de pesos en plazo fijo y anunciaba la reactivación de la obra pública.
Ya pasaron seis meses desde aquellas declaraciones, y si bien se abrieron algunas licitaciones de obra, la realidad está muy lejos de las expectativas que se generaron oportunamente.
El deterioro de la ciudad petrolera es creciente, y aunque un sinnúmero de causalidades contribuyen a esa situación, la ineficiente administración municipal supone la más grave de todas.
Abundan las declaraciones del intendente Macharashvili comprometiéndose a ordenar el espacio público y la urbanización, y dotar de servicios a todos los barrios de la ciudad. Sin embargo, lejos de mejorar la traza urbana, en el último año se ha deteriorado sobremanera, y los vecinos reclaman soluciones urgentes.
Mientras tanto, los más memoriosos se preguntan cuántos millones tiene ahora el Intendente a plazo fijo, y cuál sería el destino de esos fondos.