La cancelación de cruceros amenaza con pérdidas millonarias para Puerto Madryn y el país
Luego de que la empresa Norwegian anunciara la suspensión de recaladas previstas para la temporada de cruceros 2025/2026 debido a los costos, el sector turístico de Puerto Madryn encendió alarmas. Santiago Sussanich, presidente de la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo de Península Valdés (AAVyTPV), expresó su preocupación tras reunirse con el intendente Gustavo Sastre y representantes de la industria turística local.
Sussanich destacó las cualidades del puerto de Puerto Madryn como un destino destacado para los cruceros. “Puerto Madryn tiene un puerto modelo, exclusivo para el desembarco de pasajeros y con múltiples alternativas para la tripulación. Esto lo convierte en un destino fantástico. Sin embargo, la suspensión de estas recaladas no afecta solo a nuestra ciudad, sino también a otros puertos clave como Ushuaia y Buenos Aires”, señaló.
Impacto en la próxima temporada
El presidente de la AAVyTPV puntualizó que la cancelación no afectará la temporada actual, en la que se esperan 40 barcos y alrededor de 55 mil pasajeros, pero sí tendrá un fuerte impacto en la próxima. “Esta compañía aportaba 25 mil pasajeros, lo que representa una caída del 40% al 50% en el total de visitantes. Si esta situación se agrava, es muy probable que otras empresas también cancelen para el año próximo”, advirtió.
Esfuerzos conjuntos para revertir la situación
En la reunión, el intendente Gustavo Sastre informó sobre gestiones en curso para intentar destrabar el conflicto. “Sastre está trabajando con la Provincia y otras autoridades para lograr algún beneficio que incentive a las compañías de cruceros a mantener sus recaladas en el país. Por nuestra parte, hemos solicitado a Faevyt (Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo) que intervenga a nivel nacional”, comentó Sussanich.
A pesar de los esfuerzos, Sussanich reconoció que la problemática excede a Puerto Madryn y la provincia de Chubut. “Esto no depende de nosotros ni de la Municipalidad, pero todos tenemos un interés común: que la industria de cruceros crezca. Hoy estamos luchando para que no se caiga, cuando deberíamos estar pensando en cómo expandirla”.
Además del impacto turístico, Sussanich alertó sobre las consecuencias económicas de esta situación. “El no ingreso de estos barcos representa una pérdida de 7 millones de dólares para Argentina, incluyendo a Puerto Madryn, Ushuaia y Buenos Aires. Esto repercute directamente en los puestos de trabajo, afectando a restaurantes, comercios, guías, transportistas y demás sectores vinculados al turismo”, explicó.
Finalmente, Sussanich concluyó con un mensaje esperanzador pero firme: “Estamos trabajando entre todos para presionar y que esto se revierta. La llegada de cruceros es un motor clave para nuestra economía y no podemos permitirnos retroceder”.