EL DUEÑO DEL LUGAR NO DEJABA QUE SALGA LA GENTE PARA QUE NO LO MULTEN

Fiesta clandestina en Madryn terminó a los golpes entre el organizador y los asistentes


A las 6.30 de la mañana, personal policial intervino en el quincho de una vivienda ubicada en avenida Gales al 1100 donde se estaba desarrollando una fiesta clandestina con cerca de 30 asistentes. Al llegar al lugar, los policías lograron interceptar a cinco personas que fueron notificadas por infracción al artículo 205 del Código Penal, mientras que dentro de la fiesta apagaron las luces, bajaron la música y se negaban a salir.
El dueño de la vivienda, un joven de 22 años, dijo a los policías que solo eran cinco personas y que si querían suspender la fiesta debían presentar una orden de allanamiento. Así fue que los efectivos se quedaron en inmediaciones del lugar para evitar que quienes salían alcoholizados alteren el orden público.
Un rato después, salen otras cinco personas que lograron ser interceptadas, con el agravante de que una de ellas era un empleado policial. Minutos más tarde, dentro del quincho comenzó una pelea que se trasladó a la calle, debido a que otras personas querían retirarse de la fiesta, pero el dueño del lugar se los impedía «para que no le hagan la multa».
Finalmente, tres personas fueron demoradas por violar el Código Contravencional Vigente y el organizador quedó detenido por el delito de atentado y resistencia a la autoridad, ya que golpeó a uno de los efectivos policiales.

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