LA CAPACIDAD INSTALADA LLEGÓ AL 62,6% EN AGOSTO

Las industrias en Argentina trabajan al ritmo más elevado desde que inició la cuarentena

Durante las primeras semanas en las que Argentina se encontraba en cuarentena, lógicamente, las industrias mermaron considerablemente su producción, por lo que buena parte de las máquinas se encontraban apagadas y sin ser utilizadas.
No obstante, el último informe de la Confederación de la Mediana Empresa (CAME) indicó que en los resultados del mes de agosto se registró que el uso de la capacidad instalada de la industria pyme subió por cuarto mes consecutivo, a 62,6%, desde el 58,3% en julio. Este número es el mayor nivel desde que se tomaron las medidas de restricción en la circulación.

Rentabilidad en crecimiento

En cuanto a los niveles de rentabilidad, CAME, informó que para el 35% de las empresas fue positiva, ya que se mantuvo en niveles muy similares a julio. Sobre las expectativas hacia adelante, solo 10% de las empresas espera que la producción continúe en baja en los próximos meses, mientras que 24% espera aumentos. El resto o no sabe, o cree que se mantendrá.
Pese a estas cifras alentadoras, CAME advierte que la producción de las Pymes Industriales cayó 10,8% en agosto 2020 frente a igual mes del año pasado. «La mayor flexibilización de la cuarentena, el leve repunte del consumo, y los mayores controles a las importaciones están permitiendo acelerar el proceso de recuperación del sector manufacturero. Igual, las tasas de caídas continúan siendo profundas» analizó CAME en su informe.

Productos que mejoraron la producción

En los primeros ocho meses del año, la industria pyme acumula una baja anual de 20,8%. Como dato positivo se destaca este mes la suba de Productos de caucho y plástico con una suba del 3,3%, y que ya lleva dos meses consecutivos en alza de esa actividad. El rubro con mayor caída anual fue calzado y marroquinería con una baja del 38,1%.
Sobre este sector CAME advirtió los datos revelan «las dificultades que viene teniendo este sector para competir en el mercado local y el consumo postergado. Se destacó el cierre de varias fábricas que en algunos casos se reconvirtieron a otros rubros, y el contar con personal de mayor edad que restringe sus posibilidades de trabajar y obliga al sector a mantenerse con altos niveles de capacidad ociosa».
En Productos electrónicos e Informática, la producción se mantuvo en los mismos niveles del año pasado. «Las menores importaciones combinadas con una mejora en la demanda local, fueron muy importantes para esta actividad» explica CAME. En tanto que Alimentos y bebidas la baja anual fue de 8,9%. Según los empresarios consultados, «la rentabilidad todavía se encuentra muy afectada, incluso para las empresas que están creciendo».

Textil desaceleró la caída

El sector Indumentaria y Textil, se desaceleró su tasa de caída, que se encontraba con una baja del 22,5%. Según explicó CAME proyectan que «la caída continuará en tanto no se recupera el consumo interno ya que está muy ligado a esa demanda. Ayudan los menores ingresos de importaciones, pero no mucho más».
Por último, el sector de Productos de metal, maquinarias y equipos cayó un 19,0% anual en el mes, que se explica, según CAME, «por las menores inversiones en bienes de capital de todos los sectores industriales. También las pocas industrias exportadoras vieron frenados sus envíos al mundo por la menor demanda mundial».

ÚLTIMAS NOTICIAS