Poco más de 5.800 ciudadanos y ciudadanas estadounidenses renunciaron a la ciudadanía durante los primeros seis meses del año, cifra que el año pasado se había ubicado en menos de la mitad (2.072). Según una investigación de Bambridge Accountants de Nueva York, entidad especializada en cuestiones fiscales de los estadounidenses en el exterior, «se trata en su mayoría de personas que ya dejaron Estados Unidos y decidieron que ya están hartos de todo».

«Hemos visto que la gente dijo basta a todo aquello que sucede con el presidente Donald Trump , a cómo la pandemia del coronavirus está siendo manejada y a las decisiones políticas que son tomadas en Estados Unidos en este momento», agregaron desde la firma.

El clima político marcado por la disputa entre Joe Biden y Donald Trump también es uno de los motivos de hartazgo de quienes renunciaron a la ciudadanía: «Muchos están esperando las elecciones de noviembre para ver qué sucede. Si el presidente Trump es reelecto pensamos que habrá otra ola de gente que decidirá renunciar a la ciudadanía», figuraron desde Bambridge Accountants.