SARMIENTO – El llamativo episodio, similar a uno ocurrido semanas atrás, tuvo lugar durante un operativo de identificación de vehículos y personas, en plena zona urbana. Allí, el conductor de un Renault Logan fue instado a que detuviera la marcha para verificar el interior del habitáculo y solicitarle se identificara. Al practicarle el test de alcoholemia, el mismo arrojó un total de 1,42 gramos de alcohol por litro de sangre, casi el triple del máximo que permite la actual legislación. Preso de los nervios, al ser notificado de que le incautarían el vehículo, optó por subirse al mismo y escapar a gran velocidad, dejando a su paso nada menos que a su pareja, que luego sería contenida por los oficiales, a quienes les indicó la dirección de la casa del conductor. Fue así como los agentes concurrieron a la vivienda de la calle Colonos Sudafricanos al 300, en el barrio 36 Viviendas, y terminaron por secuestrar el rodado e imputando al hombre. La mujer también fue imputada, pero por violar la cuarentena.