La iniciativa del concejal Marcelo Gallichio (PJ) prevé la construcción, por parte de alumnos de la Escuela Politécnica de Puerto Madryn, de sillas de ruedas “anfibias” con características especiales de accesibilidad; entre ellas, las que permiten el desplazamiento en la arena, así como también la flotación en el agua, permitiendo que personas con movilidad reducida que concurran a los paradores de la costa puedan hacer uso pleno de los espacios naturales.
El proyecto, que fue transmitido por el edil a uno de los representantes de una ONG que aborda la temática de la discapacidad, fue presentado durante la última Sesión Simulada, enmarcada en la celebración de la Semana de la Discapacidad y del Día Internacional de la Discapacidad, que se conmemora cada 3 de diciembre en todo el mundo.

Bajo costo y alta utilidad

Al respecto, el concejal comentó que “realicé un proyecto para presentar en la Sesión anterior, que prevé contar con ‘sillas anfibias’ en cada uno de los paradores, pero con una característica; en el marco de las prácticas profesionales, los chicos de la Escuela Politécnica armaran la silla, y que el costo de los materiales corriera por parte de los paradores”.
Sobre este punto, aclaró que “los costos no son muy altos” y precisó que “van desde los 3 mil hasta los 5 mil pesos; la idea es que, por lo menos, cada uno de los paradores cuente con una ‘silla anfibia’ para poder disponer de las playas y que las mismas sean, realmente, adaptables, para aquellos que tengan algún tipo de discapacidad”.

Para el próximo verano

Gallichio planteó que “me pareció una buena idea y, por supuesto, los chicos estaban de acuerdo en poder hacerlo”, aunque reconoció que “en realidad, actualmente los tiempos no nos dan para que sean implementadas esta temporada, pero sí queremos hacer una la semana que viene, para que quede como muestra y ver si hay que perfeccionarla o no”.
Además, sostuvo que “queremos probar la silla esta temporada y, la temporada que viene, partiendo desde el mes de abril con las prácticas profesionales, el objetivo es hacer una silla para cada uno de los paradores, de modo de poder contar en el verano 2018-2019, con un ejemplar para cada uno de ellos”.

Cómo es el prototipo

Sobre las características de las ‘sillas anfibias’, el edil, que además es profesor en la Escuela Politécnica, especificó: “La silla es totalmente de plástico. Se hace con caños de PVC. Dentro de estos caños, se le inyecta proletano expandido, lo que la hace más reforzada, y cuentan con ruedas de plástico, que son anchas, impidiendo que se traben en la arena. La silla tiene dos empuñaduras, una en la parte de atrás, que permite desplazarse a quien vaya sobre la misma, y a la vez, en la parte de adelante hay un tiradero que permite el desplazamiento. La idea es que la silla flote, de modo que su usuario pueda disfrutar de la playa. Es decir que, aquél que tenga algún tipo de discapacidad o movilidad reducida, pueda disfrutar del agua, flotando mientras esté sobre ella.

Accesibilidad y pertenencia

El proyecto para la elaboración del prototipo se enmarca en las distintas iniciativas que los alumnos de la Politécnica han llevado a cabo tiempo atrás, entre ellas la impresión en 3D de prótesis de manos, cuyos primeros ejemplares fueron entregados a dos vecinas de la ciudad de Madryn: “Cuando uno piensa en una práctica profesional, no solamente piensa en incluir a los chicos, sino que los mismos tienen que ser parte de esta sociedad, y tienen que tener algo que siempre decimos en la Escuela Politécnica, que es el ‘sentido de pertenencia’. Haciendo esto, los chicos desarrollan un sentido de pertenencia del lugar donde viven y, por supuesto, ni hablar del hecho de ayudar a un tercero”, reflexionó.
En cuanto al proyecto y su recepción por parte de los pares del concejal, éste mencionó que “lo han tomado bien, si se hace una Ordenanza y es para ayudar a alguien, uno tiene que ponerse más que contento; me parece que seguramente acompañarán este tipo de Ordenanza, con la votación positiva, de modo que en abril del año que viene comencemos a construirla con los chicos de la Politécnica”.