Por el viento no amarró el crucero Aida Cara

Barcos Esperando Entrada a Puerto 004El temporal que se vivió en lo que va de la semana en el país dejó graves consecuencias en distintas ciudades. Puerto Madryn no escapó a ello, y tuvo su perdida en la frustrada continuidad de la temporada de cruceros.
Las ráfagas de viento en los últimos dos días pasaron los 38 km/h, lo que hizo que algunas actividades marítimas vieran interrumpido su normal desarrollo. Tal fue el caso del crucero Aida Cara, proveniente de Italia, quien tenía fijada como escala la ciudad de Puerto Madryn, pero debido a la inclemencia del tiempo no pudo amarrar en el muelle Comandante Luís Piedra Buena, cortando así la continuidad de la temporada de navíos cruceros 2013/14

Mala semana
David De Bunder, Director General de Operaciones de la Administración Portuaria, expresó que este tipo de acontecimientos climáticos no son para nada favorables al desarrollo turístico de la ciudad. “Cuando vimos el pronóstico el lunes nos dimos cuenta que no sería una buena semana, sin embargo esperamos hasta último momento para ver qué sucedía. El viento nos jugó una mala pasada, el capitán del barco dijo que era imposible poder entrar y debió partir”.
Por otro lado, De Bunder afirmó que desde el momento en que llegó el crucero el viento se mantuvo en 28 nudos permanentes y ráfagas de 38 Km/h. “Fue un viento cruzado desde el sudoeste por lo cual costaba mucho maniobrar para entrar al muelle. Tal vez si hubiese estado hacia el oeste las cosas hubieran sido distintas, pero no pasó y el buque no tuvo forma de amarrar”.

Amarre de tres en enero
Además de no poder amarrar, los tripulantes del Aida Cara no pudieron desembarcar a través de ninguna acción, ya que cuando pidieron autorización para hacerlo, el puerto ya había sido cerrado por la velocidad del viento. “A raíz de todo esto, se canceló la escala, viró y continuó viaje hacia Ushuaia. Pero está previsto que regrese a Madryn el 28 de enero, donde se encontrará con el Golden Pinces y el Infinity, lo cual nos hace que evaluemos cómo será el amarre de los tres, seguramente serán 2 en el muelle Piedra Buena y uno en el Almirante Storni. Lo que si esperamos es que en esa oportunidad el clima sea favorable” sentenció De Bunder.

Riesgos
En éstos casos, con las condiciones climáticas que se presentaron en la ciudad de Puerto Madryn, el Director General de la Administración Portuaria, manifestó que se busca mantener a salvo la integridad del barco y del muelle. “Hay un límite de velocidad de viento que se debe respetar, que son los 21 nudos, pero de todas maneras si se supera esa velocidad, y bajo el exclusivo riesgo del capitán de la nave, si el entiende que la maniobra para el muelle y el barco es segura, pide autorización e igualmente procede a entrar para su amarre. Pero en éste caso el viento excedía el límite de seguridad, por lo cual fue mejor no arriesgar”.
Si bien el riego para el muelle es grande, De Bunder dijo que la decisión queda siempre sujeta al capitán del barco. “Entendemos que quien está a cargo del buque tiene la capacidad y el conocimiento suficiente de su barco como para saber si las maniobra es lícita o no. Nosotros desde la Administración no podemos discernir si el navío tiene una maniobra en condiciones para realizar el amarre”.
Por otro lado, también destacó que existen barcos buques modernos, que cuentan con hélices laterales tanto en proa como en popa, y que se manejan como si fuera un automóvil; por lo cual el capitán debe saber cuáles son los límites hasta donde pueda llegar y la decisión queda en él.

ÚLTIMAS NOTICIAS